Conocemos que la Biblia se escribió en un período de más de mil seiscientos años. La primera parte fue redactada por Moisés y la última fue escrita alrededor de cien años después del nacimiento de Jesucristo por uno de sus apóstoles.

La Biblia es llamada el libro indestructible porque desde el comienzo de su existencia ha tenido que enfrentar muchos desafíos, desde mucho antes de nuestra década, pasando por la Edad Media hasta el presente, pues a través de la historia muchos gobiernos, imperios, ateos e incrédulos han hecho hasta lo imposible por silenciar la Palabra de Dios y evitar su expansión por todo el mundo. Sin embargo, todos han fracasado en el intento.

A raíz de tanta persecución e intentos por callar la voz de Dios, muchos escritores, filósofos y ateos ilustres afirmaron a través de la historia que la Biblia seria destruida por completo hasta el punto en que dejaría de existir.

Voltaire, un escritor, historiador, filósofo y abogado francés que figura como uno de los principales representantes de la Ilustración y quien en 1746 fue elegido como miembro de la Academia Francesa; dijo que la Biblia era un “libro desacreditado” y que además “el cristianismo iba a ser borrado de la existencia y se iba a convertir en historia”. Pero vemos que Voltaire tenía una teoría equivocada porque Voltaire murió hace unos doscientos años, pero la Biblia está todavía entre nosotros.

Por otra parte, Ingersoll, líder político y orador de Estados Unidos durante la Edad de Oro del librepensamiento y recordado por su defensa del agnosticismo, dijo que la Biblia ya no se iba a leer en diez años, pero él murió hace mucho tiempo y la Biblia continúa siendo el libro más vendido a nivel mundial.

Tenemos también al filósofo e historiador escoces Hume, quien declaró que el cristianismo iba a desaparecer en cuestión de 20 años, pero en la misma sala donde Hume murió en Edimburgo, tuvo lugar más tarde una sede de la Sociedad Bíblica.
A pesar de cada periodo de batalla por acabar con las Escrituras, es claro que la Biblia es la voz de Dios para la humanidad pues de alguna manera Dios siempre estará hablando al hombre a través de su palabra, y siendo Él el autor de la vida, Él mismo está encargado de que su palabra prevalezca ante las cosas que pasen.

¨El cielo y la tierra pasarán, pero mi palabra no pasará.¨
Lucas 21.33 RVR 1960

La Biblia es uno de los libros más antiguos, el más traducido y distribuido, y no solo se ha convertido en el número uno en ventas de todos los tiempos, sino que encabeza las listas de éxitos año tras año.
¨Secase la hierba, marchitase la flor, pero la palabra de Dios permanece para siempre.¨
Isaías 40.8 RVR 1960

¿Cuál ha sido la clave de la supervivencia de las Escrituras?
Es cierto que muchas personas han dado su vida por preservar este libro sagrado porque han amado todas las palabras de vida que contiene y han encontrado en ella un sentido para vivir, pero más aún una causa por la cual morir. Sin embargo, la clave de su supervivencia no ha sido solo el amor humano, sino la fuerza y el poder del Espíritu Santo, mediante el cual Dios inspiró a los hombres que participaron en su escritura.
¨Más la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada. ¨
1 Pedro 1:25