No es suficiente con ir el viernes o el domingo a la Iglesia, no es suficiente un versículo bíblico a la semana. ¡Dios quiere caminar contigo, todo el día, todos los días!
Muchos hombres en la Biblia fueron destacados por Dios porque caminaron con Él. Uno de ellos fue Enoc: "Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios", Génesis 5:24.
Otro ejemplo claro es Moisés. Su relación con el Señor era tan íntima y especial que Él mismo descendía al tabernáculo cada vez que Moisés entraba. Maravilloso, ¿no crees? Pues hay buenas noticias: ¡Dios quiere tener esa misma relación contigo!
El Espíritu Santo quiere caminar contigo
El Espíritu Santo busca a hombres y mujeres que quieran caminar con Él. Te ama tanto que desea que su misma presencia te acompañe a cumplir el propósito que tiene contigo.
Pero debes tener presente que Dios camina con los que le buscan, le desean, le creen y le obedecen.
¿Deseas al Señor con todo tu corazón? ¿Lo buscas todos los días? ¿Crees a su Palabra y a todas sus promesas? Y, por último, pero no menos importante, ¿Le obedeces? Si tu respuesta es sí, Él camina contigo y te dará descanso, nunca lo olvides.
Sin embargo, si tu respuesta a alguna de estas preguntas fue un no, no es tarde para que restaures tu relación con el Señor. Pídele con todo tu corazón que te enamore de Él y empieza a buscarlo incansablemente. Cuando experimentas su amor nunca más vuelves a ser la misma persona.
El Espíritu Santo se esconde porque quiere que lo busques
Claramente, el Señor se esconde porque quiere que le desees y, por ende, lo busques con todo tu corazón. No hay otra forma de encontrar su presencia. ¡Corre a tu lugar secreto y valora cada segundo que puedes pasar a solas con Él!