¿Estás afligido en tu trabajo, en tus finanzas, en tu salud o en tu familia y no entiendes por qué? Hay una noticia para ti: Dios tiene un plan y no es cualquiera.
El Señor tiene hermosas promesas para nosotros en su Palabra y una de ellas está en Romanos 8;28: "Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados".
No pienses ni por un instante que estás solo o destinado a vivir triste y afligido. ¡Dios te está empujando a sus planes y son los mejores!
¿Te imaginas lo atribulado que se sintió José cuando fue vendido por sus hermanos como esclavo en Egipto? Y no solo eso, fue enviado a la cárcel por una falta que no cometió y, además, ayudó al copero y este se olvidó de él por algunos años. Aún así, Dios tenía un plan y años después se convirtió en gobernador de Egipto. ¡Asi es, fue el segundo hombre más importante de la nación más poderosa de la época!
Dios no improvisa, siempre tiene un plan
El Señor puede usar a ese jefe injusto, a ese compañero que te hace la vida imposible y hasta al mismísimo diablo para cumplir el maravilloso plan que tiene contigo. No olvides lo que Dios nos dice en Jeremías 29;11: "Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis".
No temas, espera el plan de Dios
Aquí hay tres cosas que no debes olvidar:
- Deja de llorar, límpiate las lágrimas y declara "Dios tiene un plan para mí": cree con todo tu corazón que el Señor te está preparando, el proceso es necesario para que estés listo para recibir la bendición.
- Espera en el Señor: no importa si lo que tus ojos ven es lo contrario a lo Dios te prometió. ¡Sigue esperando, Él no llega tarde!
- Ámalo con todo tu corazón: no olvides que la Palabra dice que todas las cosas nos ayudan a bien, pero esto es para los que aman a Dios, así que no busques su mano, busca su rostro. De esta manera el Señor no solo te empujará a la bendición, también te fortalecerá en la prueba.
