Según medicina legal las muertes por estos procesos han aumentado en los últimos años un 130%.
El mito desvirtuado por los pastores Juan Sebastián y Ana María Rodríguez durante este programa fue: “Mi prioridad es mi felicidad, primero yo, segundo yo y tercero yo”.
La pregunta es: ¿Mi felicidad justifica los medios?
Arreglarse no está mal, las cirugías no están mal, depende de cada caso, pero hay que encontrar un equilibrio. La Biblia dice: ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? – 1 Corintios 6:19.
Somos mayordomos de nuestro cuerpo y el Espíritu Santo vive en nosotros, así que hay que alimentarnos bien y cuidarnos, pero necesitamos ese equilibrio perfecto, no puede ser una obsesión, nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, pero no es Dios. Cuidar el cuerpo físico no debe ser la única prioridad, debemos cuidar nuestra vida espiritual
Todos deberíamos preguntarnos ¿cuál es la motivación por la que hacemos las cosas? Un día daremos cuentas a Dios por lo que hacemos, Romanos dice que cada uno de nosotros daremos cuentas a Dios de sí mismos.
Si nos cuidamos, si al contrario nos descuidamos, si hacemos del cuerpo un dios. Por eso, necesitamos un balance perfecto… Si quieres conocer más acerca de este tema, ¿si te conviene una cirugía plástica o no? Te invitamos a ver este programa de Sinmitomanos. Está buenísimo…