El poder de Dios está disponible para todos, pero a veces no todos están disponibles para recibir el poder de Dios. A través de la historia miles han deseado ser ungidos, pero desconocen el carácter que deben desarrollar para que la unción permanezca sobre ellos. Dios desea con todo su corazón ungirte, descubre cómo formar tu carácter para poder recibir el poder sobrenatural del Espíritu Santo.
El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos. Lucas 4:18
Debes saber que la unción es el poder de Dios para liberar, sanar y transformar vidas. En la Biblia, personajes como Elías, Eliseo, David y el mismo Señor Jesús fueron ungidos por Dios para cumplir grandes misiones. ¿Te imaginas recibir un llamado así? No se trata solo de hacer cosas asombrosas, sino de tener el carácter adecuado para llevarlo con responsabilidad.
Dios sigue siendo el mismo, su poder no ha disminuido y las asombrosas cosas que hizo en la antiguedad, también desea hacerlas hoy en día a través de ti.
Separados para Algo Especial
Los ungidos fueron personas comunes, como tú y yo, pero Dios los apartó para cosas increíbles. En la Biblia, los sacerdotes, reyes y profetas recibieron unción para cumplir sus misiones. Además, la unción fue una protección los ataques del enemigo. (Éxodo 30:30-31, Isaías 10:27)
Un ejemplo fue Eliseo, quien no fue elegido por votación ni por habilidades, sino porque Dios lo decidió. Lo mismo pasa hoy: Dios no elige a los más talentosos o populares, sino a los que tienen un corazón dispuesto a seguirlo y pasión por su presencia. Si Dios llama, nadie puede detener ese propósito. (Jeremías 1:5, Juan 15:16)
Características de los ungidos
1. Conocedores de la Palabra
Aquellos que anhelan la unción deben amar las Escrituras, amar su Palabra. Pedro, aunque no tuvo estudios formales, predicó con autoridad y es evidente que conocia la palabra de Dios. Los ungidos debieron prepararse, aprender y vivir lo que predicaban. (Hechos 4:13, 2 Timoteo 2:15)
2. Servir con Pasión
Debes saber que la unción realmente no es para ti, sino para las personas que están a tu alrededor, aquellas personas a las que puedes servir y ayudar, si deseas la unción debes tener un corazón de servicio y compasión para liberar al cautivo y sanar al quebrantado. Si te gusta servir a Dios y ser fiel, Dios puede contar contigo para ungirte poderosamente. (Colosenses 3:23-24, 1 Corintios 15:58)
3. Pedir la Unción
Si deseas la unción pídela, busca a Dios, pide que Él te llene con el Espíritu Santo, la unción está disponible para todos los que desean una vida llena del poder de Dios. (Mateo 7:7-8, Isaías 61:1)
¿Quieres Ser Ungido?
Si sentiste el deseo de servir a Dios y marcar la diferencia, pídele su unción. No se trata de un título, se trata de un compromiso y una relación diaria con el Espíritu Santo. La unción cambia vidas y te lleva a cumplir tu propósito. ¿Estás listo para recibirla?