El deseo de Dios es que avancemos y fructifiquemos; y eso es algo que está puesto en nuestra naturaleza. Desde el primer hombre Dios soltó esa bendición, así que lo traemos en nuestros genes, es normal que todos queramos ir hacia arriba solamente, así es el camino del justo. Por eso, hoy te traemos 3 llaves para prosperar:
1. El Espíritu Santo: En Ezequiel 47 dice que Él es el Río de Dios y al lado de ese Río todo prospera, porque el Espíritu te enseña la palabra de Dios, te guía en el camino y te santifica.
2. La palabra de Dios: Veamos los siguientes versículos: “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien” Josué 1:8.
“Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado; sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará” Salmos 1:1-3.
Acá no se habla de prosperidad sólo en unas áreas, sino en TODO.
3. La ofrenda: Debemos volver al génesis donde el Señor dice: “Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla” Génesis 1:29. Esa planta ese el negocio que alguien tiene o su empleo, que da semilla. “Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia” 2 Corintios 9:10.
Nehemías dice que el pueblo comenzó a leer la palabra de Dios y lloraba, en Esdras dice que el pueblo comenzó a adorar a Dios, pero en Hageo dice que había escases porque no sembraban, porque no daban para la obra del Señor.
Este es un llavero que te abre la puerta a la abundancia, pero debes abrir cada una: La comunión con el Espíritu Santo, La palabra de Dios y la ofrenda. Hazlo y serás prosperado en TODAS las cosas