La reciente cruzada por la República Checa y Eslovaquia con los pastores Juan Sebastián y Ana María Rodríguez marcó un antes y un después en la vida espiritual de muchas personas.
Desde Praga hasta Olomouc, pasando por Ostrava, Trenčín, Žilina y Brno, cada ciudad vivió un tiempo impresionante, donde los asistentes llegaron con un hambre profunda por la presencia de Dios.
En cada encuentro, el fuego del Espíritu Santo descendió con poder: hubo adoración intensa, corazones quebrantados, vidas restauradas y milagros sorprendentes. Personas de diferentes culturas, idiomas y trasfondos se unieron en un mismo clamor y experimentaron libertad, sanidad y una fe renovada, en una semana que nadie podrá olvidar.
Hoy, tanto en la República Checa como en Eslovaquia, los testimonios siguen multiplicándose. Praga, Ostrava, Trenčín, Žilina, Brno y Olomouc no solo recibieron reuniones: recibieron una gran visitación del Espíritu de Dios.
