Jhon Estiven es un joven que tiene un testimonio el cual refleja el amor y el poder de Dios, una sola decisión, la de seguir al Señor; transformó su vida para siempre .
JHON ESTIVEN: El primer día, desde que vine el Señor me tocó, entre y empecé a llorar, yo no sabía por qué, pero ese día lloré antes de que empezará el servicio y hasta que se acabo.
AVIVAMIENTO: Jhon desde pequeño, estuvo en las drogas, cuéntenos de eso.
J.E: Mis papás trabajaban, yo vivía solo, un día vi un tarro de pegante lo tomé y ahí quedé, pero un día dije no mas, tenía apenas ocho años y dejé de oler pegante.
Pasaron los meses y en medio de mi soledad me tomé un veneno, traté de suicidarme, pero el Señor me salvó y me guardó la vida.
AVIVAMIENTO: Y después de eso sus papás se separaron ¿verdad?
J.E: Sí, y seguramente a raíz de todo eso caí en la marihuana, el bazuco, el popper, me volví alcohólico, tenía peleas en la calle, así que en medio de tantos problemas me fui de la ciudad.
AVIVAMIENTO: ¿Y qué decían sus papás?
J.E: Que buscará de Dios me decía mi papá… Recuerdo que un día casi me ahogo en un río, pero ese día empecé a ver la mano de Dios, unos indígenas me sacaron y una vez mas Dios me salvó la vida.
En medio de todo lo que vivía me devolví a Bogotá y vine un domingo a la iglesia, ese día lloré todo el tiempo y desde ahí, todo cambió, empet millones de pesos, solo en ocho meses.
AVIVAMIENTO: Esto solo lo hace el Señor, que le puede decir a quienes leen esta entrevista y dicen: ¿igual que Él necesito salir de las drogas o necesito de Jesús?
J.E: Dios nos va a sostener, créame que si uno no está con Dios uno vuelve a caer, Él me ha sostenido.
AVIVAMIENTO: Que bendición, y ahora ¿qué dicen sus papás?
J.E: Mi papá dice que el mejor regalo que Dios le dio en la vida fue el cambio que el Señor hizo conmigo.
Recuerden que aquí Dios nos transforma, vengan, crean, entréguenle todo al Señor.