Con cicatrices del pasado, llegó Elsa al Centro Mundial de Avivamiento hace 11 años y en este lugar fue restaurada, aprendió a ser una buscadora De Dios, lo cual le ha llevado a obtener grandes conquistas.
Elsa seguía el Avivamiento a través de los programas de canal Uno y posteriormente de ABN TV, canal 41. Aunque conocía del señor, tenía muchos paradigmas en su mente que no le permitían acercarse a su presencia, pues así se lo habían enseñado.
Cuando llegó a la iglesia observaba con reserva y timidez todo lo que ocurría en este lugar, hasta que un día su corazón se desbordó de amor y decidió confiar, descansar y disfrutar de la grandeza de Dios.
Su mayor debilidad se basaba en una baja autoestima, pues su padre le repetía desde niñas que ella no servía para nada y creció creyendo esa mentira; pues Dios se ha encargado de restaurarla y darle a conocer talentos y dones que ella no sabía que poseía.
Como el artista supremo el Señor tomó a Elsa, recogió sus pequeñeces y comenzó a moldearla para luego plantarla en este jardín de Avivamiento, hasta verla florecer en las artes.
Fue así cuando un día soñó que un ángel le enseñaba a hacer cortinas y le quedaban preciosas, a los pocos días un familiar le ofreció dinero por adelantado confiándole la hechura de unas de estas, ella recordó el sueño y no se negó.
*** “Aunque sentí temor, acepté el reto y quedaron hermosas” agregó Elsa.***
De ahí en adelante arrancó su aventura por el diseño, fue aprendiendo técnicas, formas y ahí inició su empresa de cortinas. Ahora El señor les regaló una casa comercial para extenderse y actualmente la buscan para entregarle licitaciones que ha ganado y que le han representado muy buenas ganancias.
Elsa sostuvo que todas esas bendiciones son la añadidura de buscar al Señor, quien la levanta a las 2 de la mañana para orar y ella por su parte, se siente feliz pues vive tiempos inolvidables en su presencia. Agrega que está muy agradecida con los pastores Ricardo y María Patricia Rodríguez, quienes le enseñaron a ser buscadora de la presencia del Señor y su sueño es involucrarse más y servirle incansablemente en este lugar donde ha recibido el sustento y la confianza para soltarse en los brazos de su hacedor quien se ha convertido en su roca y refugio.